miércoles, 8 de diciembre de 2010

Dunyayi Kurtaran Adam, una extraña experiencia



Dunyayi Kurtaran Adam, cuya traducción es El hombre que salvó el Mundo pero es más conocida en todo el planeta como Star Wars turca. Resulta que Turquía, pese a ser uno de los países musulmanes más vinculados a Occidente de todo el Mundo, mantuvo restricciones a la entrada de películas extranjeras durante décadas, probablemente como resultado de las leyes impuestas por las sucesivas dictaduras militares que se instalaron en el país, una de las cuales duró de 1980 a 1982, año de producción de esta película. Durante aquel largo periodo de autarquía cinematográfica los directores de cine tuvieron la suerte (o más bien la desgracia) de no tener ningún tipo de competencia, lo cual generó todo un subgénero de películas infumablemente malas en absolutamente todos sus aspectos. De esas películas la más conocida es probablemente la versión turca de Star Wars, una basura de dimensiones épicas y que yo tuve la osadía de visionar atentamente. Sinceramente lo pasé fatal, en un principio me divertía y todo pero tras el primer cuarto de hora ya estaba al borde de la depresión.



Como estoy seguro de que la mayoría de los que lean esto van a seguir sus vidas sin ver esta película me voy a tomar la molestia de destripárosla contando todos sus detalles:

Argumento


El argumento es ya de por si defectuoso. Estamos a millones de años en el futuro, la especie humana se ha extendido por el Universo. Las naciones y los países han desaparecido pero aún así están Murat y Alí, dos pilotos turcos (turcos a pesar de la extinción de las naciones) que acaban estrellándose en un planeta desértico. En un principio se sabe y se dice que aquel planeta era la Tierra pero aún así se les trata como extraños terrícolas mientras están allí. Cuando llegan, ellos, ávidos de encontrar mujeres deseosas en aquel lugar, se encuentran con un ejército de "esqueletos", sí, le pongo comillas porque en realidad eran tios a caballo con unas costillas de tela cosidas a la ropa. Nuestros valerosos protagonistas se enfrentan a ellos y vencen tras lo cual acaban llegando a Egipto, sí, lo que leeis, a Egipto en un planeta que ni ellos tienen claro si es la Tierra o no. Aquel lugar estaba poblado por unas personas martirizadas por los ataques de momias, muertos vivientes y una extraña raza de monstruos de peluche fluorescente, algunos con uñas de tela. Sin embargo esto no importa Murat y Alí se despachan a golpes y vencen a todos, algo que un emperador del espacio conocido como el Mago pone en alerta para intentar captar los cerebros de nuestros heroes para hacerse más poderoso. Sinceramente no sé para qué quería sus cerebros si ya tenía uno de plástico pintado de dorado en una caja de cartón. Murat y Alí lucharán contra la tiranía de este sujeto así como contra su manía de querer pillarles los cerebros. Entre tanto tuvieron tiempo de pasearse por antíguos templos cristianos y musulmanes desde los cuales nos explicaron el porqué de la decadencia de ese planeta. Por lo visto el Islam es la mejor cosa del Universo pero empezó a haber gente que no le hacía ni puñetero caso y por esa razón estalló una conflicto nuclear, sí, así de cabrones somos los ateos.

Sin embargo faltaba un arma secreta, una espada de cartón troquelado con forma de sierra extraña pintada de dorado derretida junto con el cerebro de plástico que dije antes. Juntos formarían una aleación en la que Murat bañará sus manos convirtiéndolas en manos invencibles. Solo en esta parte la rubia nativa que le hacía ojitos en toda la película se puso a hablar pues hasta que no llegara su salvador lo tenía prohibido.


Una vez pertrechado con tan contundente arma se desencadena la batalla final y en ella aparecen todos los seres extraños que habían salido durante esta trepidante aventura: monstruos de peluche, un robot azul de goma, karatekas con máscaras de chinos, de negros y de demonios, momias que explotan cuando les golpean, unos tios muy raros vestidos de dorado como las burbujitas de Freixenet y otros seres extraños que paso de buscar, lo siento, ni por mejorar este artículo sería capaz de volver a ver esta película.

Tras despacharlos a todos le toca el turno al Mago, sin duda es un duelo de titanes. El Mago intenta destruir a Murat lanzándole rayitos extraños y estrellas ninjas... bueno, mejor dicho bandejas de cartón con pinchos recortados. Increiblemente Murat lo esquiva todo y mata al Mago a guantazos... sí, lo habeis leído bien, lo mata a base de bofetones en la cara hasta que en un momento dado lo parte por la mitad como un karateka haría con un bloque de ladrillos...  En fin no puedo seguir sin sufrir una embolia.

Curiosidades, errores y cutreces

En este apartado me voy a despachar de lo lindo. La película tiene tantísimos errores y cutreces que casi es imposible hacer una lista de todos pero aún así voy a poner algunos de los más destacables:

1- Lo primero es que le roban escenas de la primera película que se hizo de Star Wars con todo el descaro del mundo. No sé si esto se hizo con el permiso de George Lucas pero teniéndo en cuenta el bajo presupuesto de Dunyayi Kuraran Adam casi que con toda probabilidad que ni le preguntaron. Sinceramente si yo hubiera sido George Lucas habría pasado por alto este hurto menor para que nadie se enterara de que veo estas bazofias en la intimidad


2- Para las tomas en las que Murat y Alí están pilotando la nave, que se supone que es el Halcón Milenario de Han Solo, ponen a los actores con unos cascos de moto y unos auriculares con una proyección pirata de Star Wars detrás para que parezca que están pilotando. Los gestos de tipo duro que lo tiene todo controlado y los comentarios de ligón de discoteca nos ayudan a olvidar momentaneamente estos detalles. A veces las proyecciones también fallan y como podemos observar no solo se ven naves enemigas detras sino también al propio Halcón Milenario en el que supuestamente están ellos dos así como los gráficos de sus propias pantallas.
3- En más de una ocasión cuando alguien agita su espada o el arma que sea se puede escuchar a un tio silbando como si fuera la espada la que corta el aire.

4- En escena el Mago manda un rayo contra la Tierra, se supone que la Tierra era completamente desértica pero aquí sale azul y vuela en mil pedazos por culpa del rayo pero aún así se ve como la lucha sigue en el planeta sin que nada suceda. La parte en la que destruyen la Tierra pertenece a la escena robada de Star Wars en la que Darth Vader destruye el planeta Alderaan.

5- Cada vez que Murat pega uno de sus supersaltos se escucha perfectamente el sonido de los muelles de la cama elástica.

6- Cuando los protagonistas se estrellan en el planeta están en un lugar complétamente desértico pero cuando Murat se va, la nave se alza sobre un tupido paisaje boscoso.

7- La banda sonora ha sido robada descaradamente a Indiana Jones, Moonraker, Battlestar Galactica, Ben Hur, Flash Gordon, El Planeta de los Simios y alguna otra.

8- Por extraño que parezca Dunyayi Kurtaran Adam y otras películas de este tipo fueron visionadas en Turquía como si fueran películas serias y de calidad, de hecho Cuneyt Arkin (Murat), es considerado como una estrella en su país, donde protagonizó muchas otras películas. Actualmente tiene clubes de fans, una página web oficial y fue portador de la antorcha olímpica durante los JJ.OO. de Pekín 2008.


9 - Çetýn Ýnanç fue el director de Dunyayi Kurtaran Adam. Estudió Derecho pero lo que más hizo en su vida fueron películas pseudopornográficas de las que Dunyayi Kurtaran Adam ha conservado en sus diálogos de ligones seductores cutres.


El Artista
Conclusiones

Turquía es una extraña nación y una importante guía de la que bién podríamos aprender. Aunque Dunyayi Kurtaran Adam nos haya hecho llorar de la risa hay que reconocer una cosa, esta película se hizo con un presupuesto probablemente inferior al que tengo yo ahora mismo en mi bolsillo y sin embargo la película está considerada como de culto. Existen legiones de fans y millones de menciones en You Tube y blogs de todo el mundo, en eBay te puedes comprar la banda sonora original QUE NO TIENE e incluso puedes encontrar la película en DVD. Mientras estadounidenses, franceses, españoles, etc se afanan en hacer películas buenas y solo consiguen cosas pretenciosas, aburridas, típicas, cargadas con los mismos mensajes de siempre, etc. donde ocurre todo eso Dunyayi Kurtaran Adam triunfa y una prueba de esto es que ya han hecho una segunda parte, que además cuenta con un mejor presupuesto y unos efectos especiales algo mejores.

Así pues la conclusión es que Turquía es la única nación de la Tierra capaz de vencer por hacer productos de mala calidad. Deberíamos seguir su ejemplo ¿para qué hacer los mejores coches del mundo? Construyamos coches cutres, feos y ridículos porque solo así la gente los comprará para llamar la atención, si no me creeis ahí tenéis a todos esos cutres que tunean sus coches hasta que parecen naves espaciales. En cambio si haces algo bueno alguien te imitará y te superará por lo cual nunca estaremos a gusto.

Reordemos también que en España tenemos nuestras otras "películas turcas", entre las que podemos encontrar cosas como El robobo de la jojoya, El Ete y el Oto, Que vienen los socialistas o toda la filmografía de esos dos seres conocidos como Antonio Ozores y Fernando Esteso.

Sigamos el ejemplo de Dunyayi Kurtaran Adam, ese es el camino.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sinceramente impresionante, me la descargo pero ya.
Esto hay que verlo

Anónimo dijo...

La caña de españa, bueno de Turquia.
Muy documentado el aporte, pero esto te pasará factura al cerebro